A dos horas por carretera de Ipiales, está un corregimiento cuya institución educativa hizo de todo para figurar en las pruebas de 'Supérate con el Saber 2012'. Una labor que le permitió ganar prestigio y reconocimiento no solo a sus niños, sino a toda la comunidad.
A las 4 de la mañana, buena parte de los niños de La Victoria, en el sur de Nariño, despierta para ir a clase. Desayunan en sus veredas y parten en la fría oscuridad del páramo rumbo a la Institución Educativa La Victoria, acompañados apenas por los primeros cantos de las aves, mientras sus padres se incorporan a hacer las faenas del campo y a ordeñar las vacas para las incipientes industrias de quesería de la región.
Los 670 estudiantes de La Victoria, al igual que los 360 que asisten a Nazareth -la otra institución de la zona- saben lo que es la marginalidad. No tanto por la distancia, a dos horas de Ipiales por una carretera sinuosa y difícil. Ni por el hecho de estar en el suroriente del país, viendo de frente y a tan solo a 500 metros de distancia a la población ecuatoriana de Santa Bárbara. Su distancia real con el país está en el olvido al que han sido sometidos. Y a la violencia que ha llevado a que las calles del corregimiento estén patrulladas de noche y de día tanto por soldados como por policías. Nadie los visita ni les presta atención. Las instituciones gubernamentales brillan por su ausencia y la invisibilidad parecía ser su destino.
Los 670 estudiantes de La Victoria, al igual que los 360 que asisten a Nazareth -la otra institución de la zona- saben lo que es la marginalidad. No tanto por la distancia, a dos horas de Ipiales por una carretera sinuosa y difícil. Ni por el hecho de estar en el suroriente del país, viendo de frente y a tan solo a 500 metros de distancia a la población ecuatoriana de Santa Bárbara. Su distancia real con el país está en el olvido al que han sido sometidos. Y a la violencia que ha llevado a que las calles del corregimiento estén patrulladas de noche y de día tanto por soldados como por policías. Nadie los visita ni les presta atención. Las instituciones gubernamentales brillan por su ausencia y la invisibilidad parecía ser su destino.
Pero hay oportunidades que lo cambian todo. La de La Victoria se llamó Supérate con el Saber. Y es conmovedora.
La historia hay que contarla desde el origen. Este se remonta al 2011, cuando llegó a la institución el actual rector, Adrián Arney Morán. Con diez años de experiencia como docente, había pasado por todos los campos de la educación, desde preescolar hasta bachillerato, cuando por concurso se ganó la coordinación en la institución de Nazareth y luego la rectoría en La Victoria.
Llegó hecho una tromba: decidido a hacer cosas nuevas, a transformar la visión educativa y a cambiar desde la infraestructura de la institución (está renovando, por ejemplo, las baterías sanitarias en este instante) hasta la dinámica con que los estudiantes tomaban las lecciones por obtener logros para convertir a La Victoria en un lugar que respeta hoy el talento humano y los valora como seres humanos.
Un mes después de su llegada arribó a la institución un profesor con 22 años de experiencia en las áreas de inglés y de español: Jorge Hernando Vidal. Egresado de la Universidad Mariana de Pasto, trabajó en los colegios privados de la capital de Nariño hasta que llegó a La Victoria y su aparición en la institución fue considerada por este hombre delgado y de buen ánimo como un reto y una aventura. Con eso en mente, ha buscado cada oportunidad para descollar. Ahí es donde aparece Supérate con el Saber.
Cuando Jorge vio por Internet que existía la prueba, decidió que la institución debía participar fuera como fuera. El rector Adrián lo apoyó incondicionalmente. Ambos se metieron en la cabeza que Supérate con el Saber era una buena manera de romper con la invisibilidad y demostrar lo que estaban logrando. Fue un propósito mayúsculo.
En la institución, sin calles pavimentadas y un acceso que se turna entre el polvo y el barro, los estudiantes se enteraron un día de que existían las pruebas, y que iban a competir contra todo el departamento y la región. Se asustaron. Nunca habían logrado nada y estaban acostumbrados a que Ipiales se llevara siempre los honores. De hecho, la Institución Educativa Sucre inscribió a todos sus alumnos y logró 26 premios. Pero tanto el rector como el docente insistieron y los convencieron, a pesar de que tenían todos los problemas reales para no superar las pruebas: la distancia, la falta de equipos, la inexistencia de una conexión a internet.
Para ensayar en esa primera ocasión, eligieron cinco alumnos, dos de quinto, dos de noveno y uno de grado once. La misma inscripción fue un paso difícil. Durante días lo intentaron hasta que al fin lograron alquilar módems inalámbricos, un proceso que tampoco fue sencillo porque esa tecnología no es usual en la zona y les implicó viajar a Ipiales a negociarla y conseguirla.
Los estudiantes elegidos seguían creyendo que había más medios masivos y más posibilidades en Ipiales, pero igual, siguieron estudiando, decididos a vencer. Nunca pudieron entrar a la plataforma por la falta de red, pero su profesor Jorge y el rector Adrián los entrenaron en informática y les imprimieron en Ipiales los ejercicios de la plataforma de Supérate con el Saber para que pudieran estudiarlos en casa. Además, les buscaron libros adicionales para que reforzaran su estudio. Sus padres también participaron con la motivación de que sus hijos visibilizarían a la comunidad. Entre todos se dieron a la tarea de practicar las tutorías para obtener un puesto destacado. Y lo lograron.
Clarisse Yuliana Atis (lenguas, quinto grado) y Mayra Saireth Hernández (ciencias, noveno grado) consiguieron premios y su triunfo llegó a oídos de las 18 instituciones de Ipiales y de la Secretaría de Educación de ese municipio. Los 35 docentes de la Institución Educativa La Victoria celebraron, y el corregimiento también.
"Somos instituciones que permanecemos en el olvido. Participamos en las pruebas porque era como golpear la puerta y decir 'acá estamos'. Muchos no sabían que existíamos. Ahora ya lo saben", dice Adrián, orgulloso de que su institución ya sea la séptima en las pruebas Saber 11 departamentales y de que ahora le apuestan "a la innovación y la práctica, porque de ellas surge el conocimiento".
La Victoria, patrullada por las Fuerzas Armadas, tiene ahora otra historia que contar. Entre sus parcelas y minifundios ganaderos y de cultivos de los campesinos que hacen el ordeño del ganado y jornalean con los niños de la institución educativa en la tarde, están los jóvenes que se han cansado de que la consideren zona roja. De que la olviden.
Por eso los premios los han transformado. Ahora tienen hambre de estudiar. Pero no solo eso: también tienen ganas de borrar ese estigma que cargan de ser una zona roja en el país, circundada por policías y soldados y azotada por grupos al margen de la ley. Y algo más: tienen ganas de que el corregimiento circunscrito entre las 18 instituciones educativas de Ipiales sea conocido, y de que el país entero sepa que existe y que tiene algo que decir.
Acá está. Gracias a su apuesta por el saber, ya el país acaba de saberlo.
En la foto: Adrián Arney Morán, rector de la Institución Educativa rural La Victoria, y el docente Jorge Hernando Vidal fueron los pilares para que la comunidad se destacara, apoyara el talento humano de sus jóvenes y se diera a conocer.
Crédito fotos y texto: Enrique Patiño / kikepatino@gmail.com
(Las pruebas 'Supérate con el Saber' hacen parte del Sistema Nacional de Competencias Académicas y Deportivas, un programa del Gobierno Nacional, liderado por el Ministerio de Educación Nacional y Coldeportes, que busca motivar a todos los estudiantes del país a alcanzar la excelencia académica y también quiere premiar a los maestros que sepan guiarlos en ese proceso y que, de esa manera, trabajen por transformar la calidad de la educación en Colombia. Las pruebas de 'Supérate con el Saber' se realizan en cinco áreas: inglés matemáticas, lenguaje, ciencias naturales y ciencias sociales.
En su primera versión en 2012, 'Supérate con el Saber' desbordó todas las expectativas y contó con la participación de 146.546 estudiantes de los grados 5°, 9° y 11°, de más de 6.500 instituciones educativas de 941 municipios de todo el país.'Supérate con el Saber' entregó casi 3.000 incentivos a estudiantes, maestros, directivos docentes e instituciones educativas.)
Para conocer más historias como esta, ingrese a nuestro especial de Supérate con el Saber 2012 .
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